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- Gobierno dijo que no permitirá presión de Farc en elecciones de octubre.
- Es un objetivo que aún no consigue. La voz de Reyes encendió polémica.
Catalina Montoya Piedrahíta
Como partido de izquierda, el Polo Democrático Alternativo está enfrente de un objetivo que aún le es esquivo: lograr que la opinión y los actores políticos lo deslinden de simpatías con la lucha armada.
El debate se reabrió ayer con las declaraciones de Raúl Reyes, vocero de las Farc, al diario Clarín, de Argentina, en las que afirma que el gobierno de Álvaro Uribe "debe ser reemplazado por una coalición para conformar un gobierno pluralista, patriótico y democrático, que se comprometa con la verdadera paz (...) Por ejemplo, un gobierno del Polo Democrático".
Y la posterior reacción del Ejecutivo, que interpretó las afirmaciones del líder guerrillero como un propósito de presión armada sobre el proceso electoral. En un comunicado, el Gobierno declaró que "no permitirá que ningún actor armado ilegal interfiera, a través de las armas, en la libre determinación democrática de los colombianos".
El Polo se defiende
El Polo Democrático se defendió en pleno, aunque con ciertos matices en el discurso. El senador Gustavo Petro fue enérgico: su teoría es que las Farc quieren destruir al PDA porque no les conviene la demostración de que se pueden hacer transformaciones políticas sin el uso de las armas.
Y otro tanto busca el Gobierno, que convirtió las afirmaciones de Reyes en un problema del proceso electoral actual.
"El Gobierno afirma que las Farc han dado un apoyo electoral al Polo. Pero eso por ninguna parte aparece en Clarín".
Petro, incluso, va más allá. En caso de ser partido de gobierno, el Polo solo concedería dos alternativas a las Farc: negociación para efectos únicamente de desmovilización o derrota militar.
"No vamos a hacer un gobierno democrático con las Farc ni vamos a negociar las reformas con las Farc, aunque creemos que un gobierno elegido democráticamente sí puede acabar la guerra. En eso las declaraciones de Reyes dejan una luz de esperanza".
Carlos Gaviria fue más moderado en su reacción. Dijo que le parecía "atractivo" que las Farc quieran hacer política pero con la condición del desarme.
Afirmó que al Polo no se lo puede responsabilizar por lo que hagan o digan las Farc.
Efectos políticos
El episodio de ayer, uno de varios por el estilo (ver recuadro), deja al descubierto, según el politólogo Jorge Giraldo, una discusión interna y sin resolver del Polo Democrático.
Explica que la llegada de sectores como el de Carlos Gaviria, que al principio se opusieron a hacer parte del Polo, hizo que se perdiera el consenso civilista de la organización.
"Aún no hay claridad plena, confluyen distintas posiciones frente al tema", dice.
Ahora, la afinidad expresada por Reyes hacia el Polo es explicable desde el punto de vista histórico de las relaciones entre el Partido Comunista y las Farc.
"Lo que queda de eso está en el Polo", explica Giraldo. Más el ingrediente de la carencia de las Farc de un proyecto político civil.
Pedro Medellín, analista político, resulta más optimista.
A pesar de que es evidente que el capítulo de ayer enrarece el ambiente electoral en el país, en el largo plazo es bienvenida una intención de las Farc de hacer política, sobre todo ahora, en pleno proceso de mediación con Venezuela, "que puede abrir las puertas a un proceso de paz y a un reconocimiento del estado de beligerancia de esa guerrilla".
Eso sí, reconoce Medellín, a costa del futuro electoral del Polo.
Hechos de confusión
Petro pidió más claridad contra Farc
El 4 de julio pasado, tras la muerte de los 11 diputados, el senador Petro le pidió por escrito a Carlos Gaviria ?una acción más decidida contra las Farc?. Dijo, ese en momento, que la sociedad colombiana ?no encuentra definidos totalmente los hechos que nos separan de las Farc?.
Gómez Serrano, a favor del derecho de rebelión
De acuerdo con Jorge Giraldo, otro acontecimiento reciente pero menos publicitado, mostró el debate interno del Polo. Hernando Gómez, uno de los precandidatos a la Alcaldía de Bogotá que se sometió a consulta dio declaraciones a favor del derecho a la rebelión.